jueves, 15 de enero de 2009

La política.

Sobre la política tengo mucho para decir. Pero voy a volver a citar algunos ejemplos, que ilustrarán mejor que yo, lo que les quiero demostrar. Antes una pequeña introducción.
La política puede ser practicada de diferentes formas y es conocida como “el arte de gobernar”. Existen muchas formas de practicarla, pero la que la Iglesia más acepta y promueve es la democracia. Y en una nota personal, creo que no hay mejor sistema que aquel en el cual todo el mundo tiene voz y voto. Los ejemplos que sostienen mi creencia son: El nazismo y el fascismo, principalmente. Pero la historia demuestra cientos de ejemplos de que cuando falta la democracia, faltan muchas cosas para ser una comunidad verdadera. Otro ejemplo, en mi país (Argentina) son las dictaduras que hemos vivido, la mas terrible de todas fue la de los años 1976-1983 donde los derechos humanos fueron totalmente abolidos y un grupo de personas, por la fuerza, tomó el control y evito la libre expresión y el juego político.
No creo que sea necesario remarcar lo que fueron Hitler y Mussolini, pero si voy a recalcar que ellos transformaron sus gobiernos en dictaduras y crearon la mayor desgracia del tiempo moderno: la Segunda Guerra Mundial, con su increíble saldo económico, y principalmente, humano.
Pero al principio no era así, al principio parecía que Hitler, por ejemplo, salvaría a Alemania de la mala situación en la que se encontraba tras la Gran Guerra. Él se presentaba a elecciones con su partido y paulatinamente iba ganando votos y lugares en el cuerpo legislativo nacional. Todo esto estuvo muy bien, hasta que Hitler mostró su verdadera naturaleza, y le temieron hasta los que lo habían ayudado, ya que, como todo buen dictador, supo cuales eran las necesidades del pueblo y se presentó como el único que tenía respuestas a ella, y el pueblo le creyó y le entregó todo el poder en masa. Si revisamos la historia, veremos que el conflicto alcanzó su punto máximo desde que Hitler logró imponer una dictadura y se perdió la democracia.
De la misma forma, la historia avala con otros ejemplos esto que digo. Jamás se puede eliminar la democracia en pos de un mejor sistema, porque no existe mejor sistema que aquel que les asegura a todos un lugar. Que en estos días, en muchos lugares el juego político sea malo y dudoso de confianza, es cierto. Pero son los políticos de los que hay que desconfiar, no del sistema. No fue la persona llamada “democracia” la que invadió Polonia y desató un conflicto gigantesco, fue un hombre, que la utilizó para fines mezquinos e inhumanos.
Para terminar sito otro ejemplo, pero esta vez de alguien digno de admirar: Nelson Mandela, quien fue el primer presidente negro elegido democráticamente en Sudáfrica, y marcó un antes y un después en la vida de sus compatriotas.

3 comentarios:

  1. tu mismo te diste la respuesta de el porqué la democracía es un sistema corrupto, dando el ejemplo de Hitler. La mayoría le dió el lugar de poder donde hizo lo que hizo. La democracia no funciona porque el pueblo vota por la carencia, no por lograr el bienestar, que son dos cosas diferentes ¿y quien genera la carencia? ¿quien se beneficia con ella? ¿quien financia las campañas de los políticos electos democráticamente? O vas a ser tan ingenuo como para decirme que el empresario que apoya a tal candidato lo hace con el afán de que el más apto ocupe una posición de poder.
    Democracia, como tal no existe, lo que tenemos es una oligarquía disfrazada, es cosa de revisar las conexiones familiares entre presidentes, diputados, senadores, apellidos se repiten desde que el sistema fue instaurado.

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  2. Alvaro:
    Te invito a que revises un poquito mejor la historia de Hitler. Él llega al poder por un golpe, es decir, cuando muestra su verdadera cara, ya había derogado la constitución y había tomado todo el poder en si. La democracia ya no existía, porque no se permitía el juego político (partidos opositores, elecciones, etc).
    Por tanto mi ejemplo es mas que válido, todo iba bien hasta que Hitler les quitó la democracia. ¿Otro ejemplo? El golpe de estado en Argentina en 1976 (lo cite antes, en este post). Los argentinos perdimos la democracia, y perdimos mas tarde nuestros derechos.

    Pero supongamos que tenés razón y la democracia no sirve ¿Qué proponés en su lugar? ¿Una dictadura, una monarquía absoluta? Vos decime.

    Un abrazo.

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